Si tienes un colchón nuevo, seguramente querrás que dure muchos años. Para conseguirlo, es fundamental dar mantenimiento a tu colchón. Con los cuidados convenientes, conseguirás que se encuentre en perfectas condiciones y podrás tener un sueño reparador. ¿Cómo puedes alargar la vida útil de tu colchón? ¡Te lo contamos!

Consejos para dar mantenimiento a tu colchón

Dar la vuelta al colchón de forma periódica

Uno de los puntos básicos para dar mantenimiento a tu colchón es girarlo y darle la vuelta de forma periódica. Esto permite distribuir el desgaste de una manera más uniforme, por lo que garantizas que el colchón sea funcional durante más tiempo. Lo más aconsejable es darle la vuelta al colchón cada seis meses y girarlo. ¿Qué queremos decir con girarlo?

No es suficiente con voltear la cara del colchón, sino que deberás colocar la parte donde apoyas la cabeza en los pies y viceversa. Así el desgaste también es uniforme. Al girar y voltear garantizas aprovechar al máximo ambas caras. No importa el tipo de colchón que tengas: látex, viscoelástico, muelles o espuma, ¡Dar la vuelta y girar es indispensable!

Limpieza y protección del colchón

Un buen mantenimiento de tu colchón incluye limpiarlo y protegerlo al máximo. Los colchones se ensucian por gran cantidad de motivos, incluso el colocar tu cuerpo sobre la superficie ya lo ensucia. Y es que, de forma natural, tu cuerpo suelta cabello, piel, grasa y sudor, así como manchas de sangre. Todo esto, a la larga, estropea el colchón.

De la misma manera, el ambiente también tiene repercusiones negativas. Aquí se incluyen la humedad, el polvo, la suciedad y los derrames de líquidos o comida. De entrada te decimos que lo mejor es colocar un protector para colchón que sea resistente y hacer una limpieza cada cierto tiempo, especialmente cuando derramas algo sobre la superficie.

¿Cómo dar mantenimiento a tu colchón?

En cuanto a la limpieza, presta atención. Productos como el agua oxigenada, el bicarbonato, el vinagre y el detergente, aunque remedios caseros, no se llevan muy bien con los materiales del colchón. Por eso es ideal utilizarlos solo en cantidades pequeñas y bien diluidos en un trapo húmedo. Nunca los apliques directamente sobre el colchón. Tampoco emplees productos químicos abrasivos como la lejía.

Entonces, ¿Cómo dar mantenimiento a tu colchón a través de la limpieza? Si derramas algún líquido, lo primero es utilizar un paño limpio y seco para absorber al máximo la humedad y después, si la mancha es considerable, limpia con jabón neutro, solo en el lugar en el que se produce la mancha. Al terminar, utiliza de nuevo un paño seco para secar.

Controla la humedad

Ya hemos adelantado que la humedad es un factor del ambiente que puede deteriorar el colchón. Cuando un colchón está húmedo se crea un ambiente óptimo para el desarrollo de bacterias y otros microorganismos. Y es que algunos colchones, como los de espuma, son mucho más sensibles a la humedad. En consecuencia, su vida útil se pierde considerablemente. Si vives en una zona muy húmeda o si eres una persona que suda por las noches, lo más aconsejable es que te hagas con un colchón transpirable.

Por otra parte, no te olvides de ventilar la habitación para contribuir a mantener el colchón seco y libre de moho. Puedes optimizar este proceso haciendo uso de deshumidificadores. Y te contamos más: no hagas la cama nada más levantarte. Primero ventila la habitación y después, ajusta las sábanas.

Mantenimiento de tu colchón y prevención de alergias

Ya hemos visto que la humedad puede generar la aparición de ácaros, bacterias, hongos y otros microorganismos que, si eres alérgico, pueden dañar tu salud. Lo más aconsejable es comprar un colchón que tenga tratamiento hipoalergénico o hacerte con un cubrecolchón que impida la proliferación de estos microorganismos. Por otra parte, te aconsejamos aspirar el colchón de forma regular.

Pasar la aspiradora en el colchón es una excelente manera de deshacerte de ácaros y bacterias, pero también eliminar cabellos y polvo acumulado.

¿Sol para el colchón?

El último consejo para dar mantenimiento a tu colchón es que, cada cierto tiempo, lo saques al sol un par de horas. Esto siempre tiene que hacerse en un ambiente muy controlado, es decir, un día que lógicamente no llueva ni haga mucho viento. Además, si puedes, lo mejor es colocar el colchón en el interior de la casa en una zona limpia y donde pueda recibir los rayos del sol directamente.