Los sofás cama son una solución inteligente para ahorrar espacio en lo que a hospedaje en casa se refiere, especialmente si vives en un apartamento pequeño. Un sofá cama decente debe hacer las veces de sofá funcional en el que pasar el rato y relajarse; de cama de reserva para los invitados que se queden a pasar la noche; y algunos modelos pueden incluso puede ofrecer una buena cantidad de espacio de almacenamiento ‘secreto’. ¿Qué más se puede pedir?

La respuesta, históricamente, ha sido simple: que sea cómodo. Generalmente, los sofás cama  del pasado a menudo eran horriblemente incómodos a la hora de sentarse en ellos, o no perdonaban la espalda al dormir. Y, muy a menudo, se las han arreglado para ser ambas cosas. Sin embargo, la buena noticia para cualquiera que busque los mejores sofás cama de hoy en día es que los modelos actuales han mejorado mucho en comparación con sus  predecesores. En este artículo te explicamos las cosas que debes tener en cuenta a la hora de elegir el tuyo.

Factores a tener en cuenta a la hora de elegir tu sofá cama

Los sofás cama vienen en una gran variedad de estilos y grupos de precios, y no hay un sofá cama que se adapte a todo el mundo. Al comprar el tuyo, no te dejes llevar por modas y ten en cuenta tus requisitos y expectativas.

La forma del sofá y el espacio disponible

Los sofás vienen en una amplia variedad de formas y estilos. Los tres estilos principales son el respaldo fijo, el respaldo de quita y pon (generalmente cojines grandes), y el respaldo acolchado. Considera el uso que le vas a dar al sofá, la habitación de la casa en la que lo vas a colocar y el espacio disponible en la misma, asegurándote de que su tengas suficiente espacio para el tipo de sofá que estás considerando, teniendo en cuenta el tamaño del mismo cuando esté desplegado.

El tejido y el color

Algunos sofás cama se pueden personalizar tapizándolos con el tejido o la piel de tu elección. Si decides usar tela, considera si necesitas un acabado resistente a las manchas o te vale un tejido de diseño. Por ejemplo, las telas texturizada son muy agradecidas en casas con niños, ya que aparentan estar limpios por más tiempo al ser las manchas menos obvias.  El color que elija también marcará la diferencia: los colores más oscuros tienden a ocultar mejor la suciedad y la mugre.

Sofá cama abierto

El armazón

La mayoría de los sofás cama incorporan dos. El primer armazón soporta la forma del sofá, mientras que el segundo armazón soporta el colchón y te permite maniobrar con la cama. Los armazones pueden venir en diferentes materiales, como madera y acero, siendo el segundo el que presenta una mayor durabilidad.

El mecanismo de la cama

Hoy en día la mayoría de los sofás cama están diseñados con un mecanismo  fácil de usar, entre los que destacan los siguientes

Click-clack

Son los sofás cama en los que se empuja el respaldo hacia atrás, como abriendo un libro, y duermes en la misma superficie en la que te sientas.

Extraíble

Es el modelo tradicional, en el que bajo los cojines se esconde un armazón metálico con un colchón plegado.

Deslizante

Este novedoso diseño permite deslizar el área principal de asientos del sofá hacia adelante hasta convertirlo en una cama.

El colchón

Los sofás cama se pueden fabricar con una gran variedad de colchones, desde algodón y espuma viscolástica hasta látex. Dependiendo del uso que se le vaya a dar al sofá cama (ya que no es lo mismo que vaya a dormir en él un niño que una persona mayor, ni un sofá de uso diario que uno de uso ocasional) será más conveniente un tipo de colchón u otro.