¿Estás pensando en comprarte un nuevo colchón y no sabes por cuál decidirte? Para arriesgarte con esta compra, es imprescindible conocer las diferencias entre los colchones de látex, espuma o viscoelástica.
Principales diferencias entre colchones de látex, espuma y viscoelástica
Elegir un colchón no es una tarea sencilla, no solo porque en el mercado te los encuentras de todo tipo y con tecnologías distintas, sino porque cada persona duerme de una forma que puede corresponder más a una clasificación de colchones que a otra, además de características físicas que pedirán, por ejemplo, una mayor adaptabilidad, menor o mayor firmeza o cierta recuperación a la deformación que causa el peso del cuerpo.
Colchones de látex
Un colchón de látex natural está hecho de la savia del árbol de caucho. Esta savia líquida lechosa -el látex- se procesa en bloques de espuma moldeable y elástica. Un colchón de látex es por lo tanto un producto natural, no contiene productos químicos agresivos y es naturalmente resistente a los ácaros del polvo y moho. También existen colchones de látex sintético más elásticos y gomosos, aunque el natural da más sensación de confort y suavidad. A veces se les incluye una capa de viscoelástica, y como resultado aparecen los colchones de viscolátex.
Los colchones de látex son ideales para las personas con dolor de espalda, son más naturales y duraderos. También vienen bien para los que padecen alergias, ya que su material es hipoalergénico, por lo que son considerados los colchones más respetuosos con el medio ambiente y saludables. El látex es el material más elástico que hay. Por esto, los colchones de látex se adaptan al cuerpo gracias a su núcleo, que permite minimizar los puntos de presión, haciendo que la espalda quede en su posición correcta durante muchas horas.
Los colchones de látex son perfectos para personas que se mueven mucho mientras duermen, pues, gracias a su material, no frena el movimiento. También vienen bien para adaptarse al cuerpo sin que pierda firmeza. Por otro lado, debemos señalar es que el látex es un material que evita que se acumule los ácaros, ya que en su interior no existen burbujas ni tejidos donde puedan acampar estos pequeños animales que causan tantas alergias.
Colchones de espuma viscoelástica y HR
A diferencia de los colchones de látex, los colchones viscoelásticos están hechos con espuma viscoelástica o de memoria, este material contiene poliuretano, al que se le agregan otros químicos para aumentar su densidad y viscosidad. Los colchones de este tipo de poliuretano son, por lo tanto, productos totalmentes sintéticos. La espuma viscoelástica comenzó a utilizarse en cojines de los aviones por motivos de seguridad, y en entornos médicos para reducir los puntos de presión.
Los colchones de espuma HR, forman parte de la familia de colchones de espuma con una clasificación de nueva generación que no contienen muelles. Aunque existen distintos tipos de espuma, y a diferencia de los viscoelásticos, los colchones de espuma HR, están fabricados con un material llamado isocianato. HR quiere decir High Resilence y se traduce como alta recuperación o resistencia, esto quiere decir que los colchones, después de ser usados, siempre vuelve a su forma inicial. Son poco transpirables, pueden acumular ácaros con facilidad y en general solo se recomiendan para camas donde se duerma muy de cuando en cuando.
En este tipo de colchones lo más importante es la densidad, de forma que cuanto mayor sea más consistencia tendrá, pero también sea mayor su peso.
El precio es un factor a tener en cuenta cuando hablamos de las principales diferencias entre colchones de látex, espuma o viscoelástica: un colchón de látex puede rondar los 800 €, los colchones viscoeláticos pueden alcanzar los 1000€ y lo de espuma HR los 400 €.
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