Se dice que pasamos alrededor de un tercio de nuestras vidas durmiendo, pero también nos recostamos en el colchón para descansar, hacer la siesta, ver películas, leer un libro, etcétera. Si tienes un colchón de buena calidad y muy cómodo, estamos seguros de que te cuesta trabajo salir de cama. Desde Komodissimo vamos a contarte cómo dar mantenimiento a un colchón de espuma, uno de los más populares.

Así es el mantenimiento de un colchón de espuma

En Komodissimo somos expertos en colchones y queremos contarte cómo dar mantenimiento a un colchón de espuma, uno de los colchones más cómodos que existen. Pese a su comodidad, este tipo de colchón, con el uso, puede ensuciarse con las células muertas de la piel, así como alojar pelos y vellos que se desprenden del cuerpo. Además, el sudor y otros fluidos corporales, pueden ensuciar el colchón de espuma. Y, por supuesto, si eres de los que come en cama, los alimentos también generan suciedad y manchas.

Para alargar la vida útil del colchón, garantizar el confort y, por supuesto, la higiene, es necesario saber cómo darle mantenimiento.

Cepilla y aspira

Lo primero es cepillar la superficie del colchón con un cepillo de cerdas firmes. La idea es desincrustar la suciedad acumulada y más visible, como los cabellos, pelusas, migas y hasta las células muertas. Es importante pasar el cepillo por ambas caras del colchón y también incidir en los laterales. Para remover la suciedad que sale con el cepillo, entonces necesitas pasar la aspiradora. La aspiradora también será tu mejor aliada para deshacerte del polvo.

Pasa la aspiradora para dar mantenimiento al colchón de espuma

Bicarbonato, vinagre blanco y agua

Cepillar y aspirar la superficie del colchón no es suficiente: es necesario hacer una limpieza a fondo. Para ello, te aconsejamos preparar una mezcla de vinagre blanco, bicarbonato de sodio y agua. ¡Muy importante! No utilices productos abrasivos como la lejía y el amoniaco. Para preparar la mezcla, disuelve un chorro de bicarbonato y dos cucharadas soperas de vinagre blanco en medio litro de agua.

Después, humedece un paño limpio (y que no suelte pelusas), en la mezcla y frota por toda la superficie del colchón. ¡Mucho cuidado a la hora de seguir esta técnica! No se debe mojar por completo el trapo que se va a utilizar, pues si la superficie del colchón queda muy húmeda, se crea el ambiente idóneo para la aparición de hongos, ácaros, bacterias y moho algo que, sin duda, puede estropear el colchón.

Al humedecer ligeramente la superficie, el colchón podrá secarse en poco tiempo. En cuanto al vinagre, este ingrediente es fundamental y, aunque su olor es muy fuerte, te recomendamos no descartar su uso. El vinagre es un desinfectante muy poderoso, pues cuenta con ácido acético, capaz de eliminar ácaros, hongos, bacterias y hasta virus. Por su parte, al mezclar bicarbonato y vinagre se obtiene acetato de sodio, un desinfectante muy potente.

Y claro, el bicarbonato es un desodorante ideal para eliminar los malos olores del colchón derivados del sudor o la proliferación de bacterias. Como último consejo de este apartado: si el olor del colchón es muy intenso, te aconsejamos rociar un poco de bicarbonato por la superficie cuando el colchón todavía esté húmedo.

Jabón neutro para las manchas

Nosotros siempre recomendamos el uso de un protector para colchón, pues este impide que el colchón se manche, además, el protector es muy fácil de lavar. Si no utilizas uno, esto te interesa. Para eliminar las manchas de orina, sangre y hasta comida, te aconsejamos utilizar jabón neutro. Aunque la solución de vinagre y bicarbonato suele ser suficiente, también puedes recurrir al jabón neutro si las manchas persisten.

Si vas a usar el jabón, no es recomendable aplicarlo directamente sobre el colchón, sino que debe disolverse primero en medio litro de agua y utilizar un trapo limpio para humedecerlo en la mezcla. Puedes utilizar un cepillo suave para frotar las manchas y, cuando estas se vayan difuminando, es momento de dejar el colchón a secar.

Mantenimiento de un colchón de espuma: ¿Cómo secarlo?

Después de la limpieza y desinfección, es momento de dejar el colchón a secar. En este sentido, lo mejor es colocarlo de pie contra una pared y esperar a que seque. Puedes abrir la ventanas, pero cuidado con el viento, pues si sopla mucho, el colchón volvería a coger polvo. Para acelerar el proceso, también puedes recurrir al ventilador o a un secador de pelo. En este último caso, emplea aire frío.