Seguro que en el momento de irte a la cama, en lo último en lo que se te ocurre pensar, es en el proceso de producción de los colchones. Aunque cuando pasamos una mala noche, cuando nos duele la espalda o cuando no dormimos del todo bien, pensamos que la culpa, la puede tener el colchón, que está mal hecho, defectuoso o mal fabricado. Un buen colchón va a ser bueno durante bastantes años, y si es malo, lo mismo. Para que conozcas un poco más sobre ellos, sepas darte tu propio asesoramiento y entiendas cómo son por dentro, hoy te contamos algunas curiosidades sobre su producción. Te hablamos sobre cómo se hacen los colchones según sus características.
Cómo se hacen los colchones según sus características
Lo primero que hay que tener en cuenta es que hay diferentes tipos de colchones. Cada colchón tiene unas características y cada colchón va a tener un proceso de producción diferente, ya que tiene unos materiales principales distintos. Hoy vamos a hablar del proceso de fabricación del colchón clásico de muelles, aunque también hay otros procesos. Existen colchones de muelles, colchones de látex, de viscoelástica, de espuma y de muchos otros materiales novedosos. Y esta lista va aumentando con el tiempo, a medida que se van descubriendo, nuevas formas eficaces de elaborar colchones con distintos materiales.
Cómo se hacen los colchones de muelles
La estructura de los muelles
Los colchones de muelles tienen un primer paso en su fabricación, que consiste en dar forma al alambre para colocar los muelles, que irán dispuestos en el interior del colchón. Dentro de los colchones de muelles, podemos encontrar varios tipos: colchones de muelles independientes, colchones de muelles ensacados o colchones de muelles continuos.
La diferente colocación de los muelles
Dependiendo de la categoría de colchón de muelles que estemos hablando, los muelles tienen una colocación diferente, de forma continua, en forma de Z, o una colocación individual, cubiertos con una tela de protección en el caso de muelles ensacados. Los muelles se colocan en la estructura preparada para ellos, se cubre con una capa de amortiguador de espuma.
La amortiguación
Esta capa amortiguadora es líquida en un inicio, su capacidad amortiguadora se consigue, gracias a la reacción de dos componentes, el poliol y el isocionato. Estos grupos químicos se calientan y se convierten en una espuma de grandes dimensiones, que se corta y se trabaja hasta tener la forma del colchón.
El acolchado
El acolchado tiene lugar, cuando ya se han tratado ambas capas, pues la capa y estructura de alambre, también recibe un tratado a altas temperaturas. Esto es debido a que de esta forma se vuelve flexible y así se evita que se deforme cuando se ejerce peso sobre ella.
Llega el momento del acolchado, que simplemente cosiste en la colocación de telas, de diferentes grosores, para envolver el colchón hasta lograr el volumen y textura deseada. Se unen todos los componentes del colchón y está listo para recibir descanso y noches de sueño profundo.
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